En enero de 1957 comenzó a funcionar la Casa de Ejercicios que es de los P.P Jesuitas. Tiene 66 años de fundación, donde la Hna. Isidra Elorriaga E.C.R. estuvo más de 50 años en ella.

Las Hnas. E.C.R. comenzaron en la Casa invitadas por los Padres S.J y por la Diócesis de Maracaibo de ese entonces con Mons. Ali Lebrum.

Las Hnas. atendían los primeros grupos de retiros, vivían en la Casa y pasaban al Colegio Javier que está en frente de la casa a dar clase a los niños de la Escuelita Javier como así la llamaban. Estudiaban y daban también catequesis a los niños, a la vez que atendían la Casa de E.E.

Después de algunos años ya las Hnas. estaban independientes del Colegio. Se estableció una comunidad para el colegio Javier y otra en la Casa de Ejercicios, a la cual acudían muchísimos grupos de toda clase, y en grandes cantidades de gente.

Con el paso de los años y con la falta de vocaciones ya se redujo el número de Hnas para atender la Casa. En este momento están solamente 2 hermanas y los grupos se han reducido. Ahora se llama CEP «Centro de Espiritualidad y Pastoral”. Ha sido también la situación del país y la pandemia mundial la que ha producido un alejamiento de la gente de la casa por falta de recursos y prioridades de salud y manutención.

Las Hnas. ya no administran directamente la Casa, ahora hay una administradora laica. Las Hnas. acompañan y acogen a las personas que vienen a la casa. Al frente de todo los Padres Jesuitas son los que dirigen la Casa desde Caracas; un Sacerdote jesuita del Colegio de Maracaibo acompaña y da algunos retiros en la Casa, atiende la parte Pastoral. Además han organizado un servicio de Voluntarios que atienden algún día de la semana a personas necesitadas a nivel psicológico y espiritual…

Las Hnas. también acompañan a las personas que solicitan esta ayuda espiritual, atienden la comunidad parroquial, visitan a los enfermos y les llevan la comunión. Acompañan Ejercicios a grupos y E.E en la vida corriente en la casa y en alguna parroquia.

Después de la Pandemia van acudiendo a la casa más grupos para hacer su experiencia de retiro espiritual y se les ayuda en la medida que las Hnas. pueden a nivel económico y de ayuda socioemocional.

La Casa necesita recursos para que esté en mejores condiciones de infraestructura. Las Hnas. promueven y organizan también retiros abiertos cada mes, para dar oportunidad a todos sin distinción.

Esta casa de Dios es para el servicio de mucha gente a nivel humano, espiritual y moral. Muchos renuevan su vida y conocen a Dios para vivir más felices en medio de cualquier circunstancia.

Seguimos las E.C..R acompañando en todo, amando y sirviendo para gloria de Dios.